The Batman
Nuevo «reboot» de las aventuras del personaje creado originalmente por Bob Kane, que en esta ocasión ha caído en manos del cineasta Matt Reeves («Cloverfield», «Let Me In», «Dawn of the Planet of the Apes«, «War for the Planet of the Apes«) y del actor Robert Pattinson. La historia sigue a Batman tras la pista de Enigma (Paul Dano), un peligroso asesino que va acabando uno a uno con la vida de nombres importantes de la ciudad de Gotham, los cuales supuestamente habrían estado implicados en crímenes o tramas corruptas. Con la ayuda del comisario Gordon (Jeffrey Wright) y de Selina Kane (Zoë Kravitz), el hombre murciélago llevará a cabo su búsqueda sumergiéndose en el peligroso mundo del hampa de la ciudad, liderado por Falcone (John Turturro) y el Pingüino (un irreconocible Colin Farrell). El film de Reeves se asemeja más en tono a los Batman de Christopher Nolan que a los de Tim Burton o Joel Schumacher, con una estética tenebrista y mucha solemnidad, aunque Reeves confía más en la atmósfera que en sus personajes. Con inspiraciones evidentes en «Se7en» o incluso «Zodiac«, lo sorprendente es lo pobre que es el guión en lo referente a la «investigación» que lleva a cabo Batman, incluso con las tres horas de duración de la película, que también son muy excesivas porque hay muchos pasajes o secuencias dilatadas. Los resultados por lo tanto son muy irregulares, aunque el tono de la película es cautivador en algunos segmentos. Andy Serkis, como Alfred y Peter Sarsgaard, como un fiscal corrupto, completan el reparto.
El director de fotografía es el australiano Greig Fraser [ASC, ACS], uno de los operadores de moda en la última década, que además ha visto coronada su trayectoria con el premio Oscar obtenido con «Dune: Part One» (Denis Villeneuve, 2021), de la cual Fraser y el director canadiense ya están rodando la segunda parte. El australiano llamó la atención internacional con «Bright Star» (2009) de la mano de Jane Campion, para posteriormente dar el salto a los EEUU precisamente con Matt Reeves con la versión americana de «Let the Right One In«, es decir, «Let Me In» (2010), que es uno de los escasos remakes que mejoran a los originales. Después vendrían colaboraciones con Andrew Dominik en «Killing Them Softly» (2012), con Kathryn Bigelow en «Zero Dark Thirty» (2012) o con Rupert Sanders en «Snow White and the Huntsman» (2012). Con Bennett Miller trabajó en «FoxCatcher» (2014) y posteriormente Fraser se adentró en el universo de «Star Wars» con «Rogue One» (Gareth Edwards, 2016), que probablemente tiene la mejor fotografía de toda la saga junto con el trabajo de Peter Suschitzky en «The Empire Strikes Back«. En ese mismo año rodó «Lion» (Garth Davis, 2016), que le supuso su primera nominación al Oscar y también al premio de la Sociedad Americana de Directores de Fotografía (ASC), que además, ganó. Posteriormente, se ha encargado de «Vice» (Adam McKay, 2018) y de arrancar la serie «The Mandalorian», precuela de «Star Wars» creada por Jon Favreau.
«The Batman» es la primera película sobre el personaje rodada en formato digital y, como en el caso de «Dune», Greig Fraser ha optado por la Arri Alexa LF como cámara. En cuanto a las ópticas, este director de fotografía es conocido porque no suele repetir con el mismo juego dos trabajos seguidos, aunque venía de rodar «The Mandalorian» y «Dune» con los Panavision Ultra Vista, anamórficos especiales para cámaras Full Frame. En este caso, según comenta el propio Fraser, Arri le ofreció probar una versión inicial de su nueva serie de anamórficos también para Full Frame, los Alfa, basados en los Arri Master Anamorphics para formato Super 35. Pero la versión 1 de dicha serie, no le habría gustado a Fraser por ser demasiado «perfecta», por lo que habría reclamado cambios materializados en la version 2, que es con la que rodó el film (actualmente la versión que alquila Arri es la versión o serie 3). Estos Arri Alfa Series 2 poseen multitud de defectos y aberraciones, hasta el punto que alguna de las focales únicamente permite mantener enfocado el centro de la pantalla, con los bordes absolutamente desenfocados debido a la curvatura de foco de las lentes. Adicionalmente, al menos esta serie 2 de los Alfa (que abren a T2.2) no parece ser demasiado contrastada a máxima apertura e introduce aberraciones cromáticas. Como los de los Master Anamórficos convencionales, los destellos o flares no son precisamente los más vistosos, pero ese desenfoque en los bordes hace que el aspecto sea algo extraño, entre tanta oscuridad, escasa profundidad de campo (que desenfoca los fondos) y muy poco foco en los laterales de la imagen. Adicionalmente, en la secuencia de la persecución, Fraser parece ser que usó en las «crash cams» cámaras Arri Alexa de primera generación (pero que tienen el mismo sensor que la LF, solo que más pequeño) con ópticas anamórficas Atlas Orion Anamorphic combinadas con las lentes soviéticas Helios y Jupiter con el rehousing de Iron Glass Adapters y el cambio de iris de circular a elíptico.
Estéticamente, «The Batman» es una película que transcurre casi al cien por cien en situaciones nocturnas y de bajísimos niveles de iluminación. Pero además, Greig Fraser expone de tal manera que sitúa gran parte de la información muy por debajo del gris medio, de manera que el film prácticamente carece de altas luces, posee algunos tonos medios y, sobre todo, lo que tiene son muchas, muchas sombras. Este tipo de exposición hace, de este modo, que casi toda la información esté en un rango muy comprimido y, además, para no enterrar el detalle en el negro, la parte más baja de la curva no está pegada por completo, por lo que el negro es translúcido y el contraste, entre bajo y muy bajo. Ello ofrece un aspecto similar al que se producía en celuloide cuando un negativo estaba corto de exposición y los negros no llegaban a ser negros del todo (lo que se conocía en el argot como «ala de mosca«), situación que parece estar buscada además porque como en «Dune», el material de «The Batman» ha sido filmado en un negativo Kodak y, como novedad, también en un positivo. Posteriormente, dicho material se ha escaneado y Fraser y el colorista han decidido si emplear el material procedente del negativo o el del positivo y etalonarlo a su gusto. El efecto global es que la película posee una apariencia orgánica incluso en 4K HDR, muy lejos de la nitidez, contraste o saturación de color muy elevada que suele producirse en rodajes digitales, pero con la ventaja de los bajos niveles de luz y el tipo de rodaje que desde luego permite la adquisición en HD.
A nivel de luz, «The Batman» es una película en la que predominan las noches en tonos cálidos de la luz de sodio, con algunos azules (no demasiados) y muchos grises. Todo el material posee cierta verosimilitud en su planteamiento, lo que tampoco quiere decir que sea realista ya que lo que consigue Fraser es crear un mundo único, propio para el film, pero que la luz del mismo no parezca que obedece a los caprichos del director de fotografía, sino a una lógica interna que queda bien establecida en el film y se sigue continuamente en el mismo. Todo el film es estilizado pero sigue una línea muy definida, marcada por Fraser desde el comienzo y que después la sigue a la perfección. Solo hay momentos claramente diferentes, como por ejemplo los de la discoteca en los que introduce luz roja, o algunos en los que hay más inspiración (como las metralletas cuyos disparos son la única fuente de luz de una escena concreta). El grueso del film posee esa luz muy suave, de intensidad baja, en la que hasta los rostros de los personajes (incluso cuando no llevan máscaras) están bajos de luz, todo ello ejecutado con aparatos LED de última generación (sobre los que Fraser asegura que además le permiten un ahorro considerable de energía, ya que únicamente recurre a HMIs o aparatos de tungsteno cuando no existe un equivalente en LED para realizar o crear los mismos efectos). En general, Fraser emplea mucha luz cenital y unos niveles que permiten que únicamente se vislumbre hasta el traje de Batman, de manera que el director de fotografía tiene que poner algo de luz justo sobre los ojos de Robert Pattinson para poder ver algo al personaje.
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Los resultados son generalmente muy buenos y muy vistosos, pues gracias al empleo de unas ópticas modificadas para obtener un aspecto tan peculiar -con el centro nítido y los bordes perdiendo foco paulatinamente, en algunas focales de manera hasta exagerada, que hace que gran parte de las composiciones de imagen a la fuerza tengan que estar centradas-, gracias también a los bajos niveles de iluminación, que por un lado provocan que la profundidad de campo sea escasa y, por otro, que todo el film esté expuesto en la parte baja de la curva, así como una iluminación que rehusa en gran medida a casi cualquier color que no sea el de la luz de sodio y alguno de azul, el film posee un aspecto que, por lo general, posee mucho empaque y le da ese aire de solemnidad que comentábamos que posee la película. Esto tiene como parte buena que el aspecto es único y personal, ya que además se separa mucho del Batman («Batman«, «Batman Returns«) de Tim Burton y del de Joel Schumacher (sic), pero también, por otro, también difiere del «look» de alto contraste, a veces incluso hiperdefinido con su rodaje en gran formato (IMAX), del Batman («Batman Begins«, «The Dark Knight«, «The Dark Knight Rises«) de Christopher Nolan. Este «The Batman» de Matt Reeves es más oscuro, difuso, discurre más entre las sombras y posee un aspecto neblinoso y algo más difuso (con algo de humo y/o filtraje en rodaje), incluso con tratamiento de ópticas y de post-producción que hacen que, aun siendo una película rodada en HD, posee cierto aspecto orgánico y aleatorio. Lo malo (y esto es una opinión personal) es que, durante tres horas de proyección, el aspecto visual es tan unitario que puede llegar a hacerse monótono y reiterativo, pues de pura cohesión del material, éste es siempre igual, sin que exista una variedad de situaciones (o mejor dicho, de estilos lumínicos) a lo largo de la proyección, pues el film está absolutamente centrado en su ambiente nocturno y decadente de Gotham y salvo en contadísimos planos, no hay más variedad en su planteamiento.
Título en España: The Batman
Año de Producción: 2022
Director: Matt Reeves
Director de Fotografía: Greig Fraser, ASC, ACS
Ópticas: Arri Alfa Series 2, Atlas Orion Anamorphic, Iron Glass Helios & Jupiter
Formato y Relación de Aspecto: Arri Alexa LF (4.5K Arriraw), 2.4:1
Vista en HDTV 4K HDR
© Ignacio Aguilar, 2022.
