Whiplash

Uno de los “sleeper” o éxitos sorpresa de la temporada, con un argumento que gira en torno a un joven (Miles Teller) que con el fin de dedicarse a tocar la batería de forma profesional, se enrola en una prestigiosa escuela de Nueva York en la que se encuentra con un tremendo obstáculo: un profesor (J.K. Simmons) con un elevadísimo nivel de exigencia, al cual no le importa maltratar física y psicológicamente a sus alumnos para obtener el máximo potencial de los mismos. Chazelle, que el año anterior dirigió un corto con el mismo nombre para conseguir los fondos necesarios para realizar esta película de bajo presupuesto, dirige a sus veintinueve años con la soltura y oficio de un maestro –atención al montaje del film- y ofrece un tremendo duelo actoral entre Teller y Simmons (especialmente memorable en su rol, por el que obtuvo el Oscar al mejor actor secundario), con la música jazz como trasfondo y un fuerte mensaje sobre el esfuerzo como base del éxito que es el inicio del conflicto plasmado en pantalla. El extraordinario montaje, así como la mezcla de sonido, también obtuvieron sendos premios de la Academia de Hollywood, mientras que la propia película y el guión fueron finalistas al premio.

whiplash-02

Sharone Meir es el director de fotografía de la película. Con una carrera principalmente televisiva a sus espaldas y solo algunos estrenos cinematográficos –como “Coach Carter” (Thomas Carter, 2005) o el remake de “The Last House on the Left” (Dennis Iliadis, 2009), era hasta la fecha un desconocido. En el momento de la publicación de estas líneas, sin ir más lejos, ya cuenta en su currículum con proyectos a cargo de reputados cineastas como Uli Edel o Bruce Beresford, si bien aún pendientes de su estreno, lo que hace augurarle una incipiente carrera a raíz de este título, en el que la parte visual no es el punto más fuerte de la propuesta, aunque sí un elemento esencial de la misma que colabora activamente en el éxito del conjunto.

whiplash-01

La película está rodada mediante adquisición digital, haciendo uso de la cámara Arri Alexa. Probablemente debido al bajo presupuesto los cineastas no pudieron hacer uso del formato ArriRaw, debiendo conformarse con un Pro-Res que ofrece resultados muy parecidos, si bien la flexibilidad en post-producción no es tan amplia. Sin embargo, los cineastas tuvieron acceso a las novedosas y excelentes ópticas Leica Summilux-C, las cuales no han dejado de ganar terreno desde su introducción en el mercado hace dos o tres años, mientras que una Canon 7D equipada con lentes Cooke Speed Panchro se empleó para rodar algunos planos muy cortos y/o insertos en aquéllos lugares en los que no podía llegar o no era práctico rodar con la Alexa, en su mayor parte durante la escena que cierra la película. Filtros Glimmerglass se emplearon durante la producción para suavizar las imágenes, mientras que un Double Fog se utilizó –con un excepcional resultado- en la escena final para crear un halo en las áreas sobreexpuestas de luz y ocultar que el auditorio apenas contenía figuración.

whiplash-03

Una de las inspiraciones estéticas del film fue “The Godfather”, con el trabajo de fotografía en interiores de Gordon Willis. Con ella comparte “Whiplash” la luz cenital de muchas de sus escenas, así como un tono muy dorado o amarillento en este tipo de escenas. Meir no solo utiliza una luz suave procedente del techo, sino que en muchas escenas en las que los músicos practican o tocan ante un publico, emplea pequeños “spot-lights” o luces puntuales para resaltarlos a ellos o a sus instrumentos musicales. También es curioso como Meir deja que sus paredes muchas veces aparezcan completamente negras, lo cual, unido a que el vestuario de J.K. Simmons también es de ese color, hace que en muchos momentos solo se vea a la cabeza del actor gritando, gesticulando u ordenando a los músicos, mientras su cuerpo prácticamente se funde con los negros fondos. En casi todo momento, además, la profundidad de campo es muy reducida, gracias al empleo de las ópticas a grandes aperturas de diafragma, muchas veces cercana a la máxima (T/1.4).

whiplash-04

Los exteriores nocturnos hacen uso en gran medida de la luz de sodio disponible en las calles de Nueva York, bloqueándola en los primeros términos en los que se ubican los actores, que están modelados con luz cinematográfica. En general, las mezclas de color son uno de los rasgos identificadores de la película, con fuertes virajes a verdes o con la presencia de fluorescentes sin corregir, que añaden una capa de verosimilitud al conjunto. El trabajo de cámara de Chazelle es muy vigoroso, incluyendo mucho movimiento, travellings, los citados insertos, etc. que hacen que una película que a priori no ofrecía mucho juego estético, sea muy dinámica e interesante a nivel visual; no es que lo que hace Meir sea especialmente vistoso o sugerente, pero consigue una atmósfera algo lúgubre, contrastada y muy cálida que apoya muy bien al duelo en pantalla, por lo que ¿qué más se le puede pedir?

Título en España: Whiplash
Año de Producción: 2014
Director: Damien Chazelle
Director de Fotografía: Sharone Meir
Ópticas: Leica Summilux-C & Cooke Speed Panchro
Formato y Relación de Aspecto: Arri Alexa (Prores), 2.4:1

Vista en DCP

© Harmonica Rental & Cinema/Ignacio Aguilar, 2015.