Lawrence of Arabia
Superproducción de Sam Spiegel dirigida por David Lean, en la que el realizador británico narra los episodios centrales de la vida del coronel T.E. Lawrence (Peter O’Toole), el cual, durante la primera guerra mundial, fue el artífice de la unión de las tribus árabes contra el Imperio Turco. La película se centra sobre todo en la personalidad contradictoria y excéntrica de Lawrence, así como en su ascenso y caída. Lean consiguió repetir el éxito crítico de “The Bridge on the River Kwai”, incluyendo un nuevo Oscar al mejor director al frente de una producción muy complicada, pero que a la postre se convirtió en un clásico del séptimo arte. Omar Sharif, Anthony Quinn, Claude Rains, Anthony Quayle, Arthur Kennedy y Jack Hawkins, entre otros, confirmaron el amplio reparto de una película que en sus más de tres horas y media de duración, no contiene ni una sola línea de diálogo en boca de una mujer. El músico francés Maurice Jarre también obtuvo un Oscar por su extraordinaria banda sonora, así como la montadora Anne V. Coates, el diseñador John Box, el director de fotografía Freddie Young, los técnicos de sonido y el propio film como mejor del año 1962.
Sin embargo, originalmente, Freddie Young [BSC] –un veterano de la industria, que por aquél entonces ya tenía sesenta años- no iba a haber sido el encargado de rodar el film. Lean quiso evitar a Young a toda costa, a pesar que éste estaba considerado el número uno de su oficio en el Reino Unido, debido a un problema que habían tenido durante el rodaje de “Major Barbara” (Gabriel Pascal, 1940), el film en el que Lean debutó como director de manera no acreditada. Siendo la primera producción británica en 5-perf 65mm (Super Panavision 70), la Columbia propuso que el director de fotografía fuera el norteamericano Robert Surtees (“Quo Vadis?”, “Ben-Hur”, “The Graduate”, “The Last Picture Show”), ganador de tres Oscar a lo largo de su carrera. Surtees, sin embargo, estaba comprometido para rodar “Mutiny On The Bounty” (1962) y no estaba disponible. Lean intentó entonces que Geoffrey Unsworth (“2001”, “Superman”), que había rodado los tests de Albert Finney como Lawrence, asumiera el mando, pero tampoco estaba disponible, al igual que antiguos colaboradores como Oswald Morris, Jack Hildyard o Guy Green (que se había pasado a la dirección, al igual que Jack Cardiff). Sin muchas más opciones, Lean ofreció el film a Young, que asumió el mando de la película junto con el cámara Ernest Day, que venía de rodar “Exodus” (Otto Preminger, 1960) en 65mm. Nicolas Roeg [BSC], Skeets Kelly [BSC] y Peter Newbrook [BSC] asumieron el mando de las segundas unidades de la película.
El rodaje, que debía de llevarse a cabo íntegramente en Oriente Medio, con Jordania como centro de operaciones, acabó trasladándose a España hacia la mitad del mismo, cuando a Sam Spiegel comenzó a entrarle prisa porque el director terminara y decidió ejercer un mayor control sobre la producción, que también rodó durante algunas semanas en Marruecos. En España se utilizaron lugares como las dunas del Cabo de Gata (las escenas de los trenes), la Playa de El Algarrobico en Carboneras (Aqaba), Almería capital, las Ramblas del desierto de Tabernas, asícomo los pabellones y recintos de la Exposición Universal de 1928 en Sevilla, entre otras localizaciones. Las espectaculares localizaciones jordanas, con Lawrence y sus hombres cruzando desiertos, son lo más recordado de la película, junto con el plano de presentación de Omar Sharif a modo de espejismo, rodado con un teleobjetivo especial de más de 400mm de focal. En ellas es donde Lean, Young y el cámara Ernest Day dan lo mejor de sí mismos, capturando el paisaje en toda su gloria, grandeza y esplendor, llevando a cabo un hito de la historia del cine, debido a las dificultades logísticas de rodar en parajes tan remotos y en condiciones que distaron mucho de ser óptimas.
En estos exteriores es donde se aprecia mejor el aproximamiento de Lean y su especialidad: narrar historias personales en grandes marcos históricos y suntuosas localizaciones. Cuando la cámara no está captando increíbles y enormes parajes para acercarse a los personajes, se comprende aún más la dificultad del rodaje, ya que para contrarrestar la tremenda intensidad de luz del sol, Young debe utilizar las grandes y pesadas luces de arco para rellenar las sombras. El estilo del operador es absolutamente clásico; diez años después muchos directores de fotografía habrían sobreexpuesto cielos y rostros sin pudor para lograr que las sombras fueran mucho menos densas y casi no tener que utilizar relleno, pero Young expone para una reproducción óptima de los cielos y por lo tanto, sin sus luces los actores hubieran quedado oscuros. Hay mucho, muchísimo material en noche americana a lo largo de la película, quizá la única forma de afrontar esas grandes escenas nocturnas en mitad del desierto tratando de satisfacer a Lean, al cual era evidente que le gustaba que sus personajes estuvieran siempre atrapados por el escenario. En este aspecto, incluso las noches tienen una profundidad de campo máxima; todo el film está rodado a diafragmas muy cerrados, la única forma de obtenerla rodando en formato 65mm. Aunque la película está rodada en todo tipo de condiciones lumínicas, Young sí que consigue ingeniárselas para que el aspecto más frecuente sea el de la luz de mediodía. No obstante, tras secuencias como cuando Lawrence trae de vuelta a Gasim desde el desierto, o tras la toma de Aqaba, el operador británico hace uso o simula muy bien brillantes y emotivos atardeceres.
Las escenas interiores rodadas en localizaciones españolas son quizá lo menos interesante de la película a nivel visual. Quizá por tener que adaptarse a las circunstancias, además de por la exigencia de Lean de que se vieran los exteriores a través de las ventanas, el trabajo de Young en las mismas es muy convencional y clásico, con las típicas luces duras y dirigidas contra los actores para que siempre se les vea bien y con la exposición adecuada para que tengan un correcto balance con el exterior. Incluso en las secuencias de O’Toole y Claude Rains por los pasillos que simulan las dependencias británicas en El Cairo, Young no tiene el menor disimulo en montar aparatos de 10Kw en travellings y moverlos al mismo tiempo que la cámara, para mantener la exposición de los actores al tiempo que ésta se mueve. Las escenas interiores nocturnas, como por ejemplo las finales en Damasco, sí que son más interesantes, con las mezclas de temperatura de color (azul saturado para la luz de la luna y naranja para los interiores) también típicas del período clásico.
Los resultados globales, de todas formas, son muy, muy buenos, sin que la utilización de ideas de iluminación en localización que por aquél entonces estaban a punto de quedarse anticuadas resulte del todo inapropiado, dado el planteamiento general de la película y de su fotografía. Sin duda, el trabajo de interiores de Young en “Doctor Zhivago” –rodada íntegramente en decorados creados por John Box- es mucho más refinado aún siendo igual o tan clásico como el presente, pero lo cierto es que “Lawrence of Arabia” posee un rodaje en exteriores y en localizaciones tan grandiosas que compensa que sus interiores no estén tan inspirados. Porque precisamente, ya que un buen paisaje ayuda pero no hace una fotografía, la tremenda inspiración de Lean y su equipo a la hora de captar todas sus localizaciones –e incluso hacer creíble la variedad de lugares de rodaje- es lo que hace que su trabajo en “Lawrence of Arabia” sea un clásico indiscutible, lleno de imágenes irrepetibles que narran a la perfección una historia tan veraz como increíble, que aquéllos que han podido presenciar en 70mm consideran irrepetible. Young se alzó con todos los premios importantes de fotografía cinematográfica aquélla temporada y como colofón, en 1998, su trabajo fue elegido por la American Society of Cinematographers (A.S.C.) como el mejor de la segunda mitad de siglo.
Título en España: Lawrence de Arabia
Año de Producción: 1962
Director: David Lean
Director de Fotografía: Freddie Young, BSC
Ópticas: Panavision 65mm
Emulsión: Kodak 5251 (50T)
Formato y Relación de Aspecto: 5-perf 65mm (Super Panavision 70), 2.2:1
Premios: Oscar a la mejor fotografía, BAFTA, British Society of Cinematographers
Vista en Blu-ray
© Harmonica Rental & Cinema/Ignacio Aguilar, 2015.