The Man With The Golden Gun

Segunda película de Roger Moore como James Bond, rodada a continuación de la primera, “Live and Let Die”, en la que el famoso agente del servicio secreto británico tiene que hacer frente a un peligroso asesino, Scaramanga (Christopher Lee), que vive en una paradisíaca isla en aguas de China y que se caracteriza por la pistola y balas de oro que utiliza para matar a sus víctimas. Más entretenida y espectacular, por localizaciones y por el propio concepto, que la anterior “Live and Let Die”, “The Man With The Golden Gun” tuvo sin embargo diferentes problemas de producción (de hecho, fue el último Bond producido por Harry Saltzmann, quien tuvo que vender su participación en la franquicia para cubrir sus deudas) que a punto estuvieron de suponer el final de la serie. Maud Adams, en el primero de sus dos papeles como chica Bond, Britt Ekland, Clifton James, repitiendo su papel de la película anterior, y el diminuto Hervé Villechaize secundaron a Moore y Lee en los roles principales.

El director de fotografía, una vez más, volvía a ser Ted Moore [BSC], que enlazaba su tercera película Bond consecutiva, además de haber rodado las cuatro primeras (“Dr. No”, “From Russia With Love”, “Goldfinger” y “Thunderball”), pero sin embargo, fue sustituido durante el rodaje por Oswald Morris [BSC] e incluso durante una semana parece ser que por Ernest Day [BSC] (director y director de fotografía de segunda unidad), al sufrir una enfermedad que le impidió continuar con el rodaje y que le mantuvo alejado del cine durante varios años, hasta regresar con “Orca” (Michael Anderson, 1977). Morris, que como Moore, había ganado el Oscar recientemente por su trabajo en la película de Norman Jewison “Fiddler on the Roof” (1971), es famoso sobre todo por su asociación con el realizador norteamericano John Huston, con el que fotografió obras como “Moulin Rouge” (1950), “Moby Dick” (1956) o “The Man Who Would Be King” (1975), siendo además el director de fotografía de películas como “Lolita” (Stanley Kubrick, 1962) o “Sleuth” (Joseph L. Mankiewicz, 1972), retirándose en 1982 con “The Dark Crystal” (Jim Henson & Frank Oz).

El mayor interés a nivel estético de “The Man With the Golden Gun” reside, por lo tanto, en jugar a averiguar qué escenas fueron fotografiadas por Ted Moore y qué escenas fueron aquéllas de las que se hizo cargo Oswald Morris. Sin tener el más mínimo detalle de la producción, en líneas generales se puede afirmar que Moore rodó gran parte de la fotografía en localizaciones en Tailandia, mientras que Morris se hizo cargo de los interiores de estudio, algo que además tiene lógica porque es normal que estos últimos se construyan mientras en equipo pasa algunas semanas fuera de los platós. Todo esto es evidente no solo porque Morris fuera un mejor y más talentoso director de fotografía, sino porque su estilo, aunque solo se llevaban un año de diferencia de edad, era bastante más moderno que el de Ted Moore. Por lo tanto, gran parte de los exteriores y secuencias rodadas en localizaciones tienen el típico aspecto de la fotografía de este en los seis títulos anteriores que rodó: mucha luz dura, esquema básico de tres puntos de luz y abundante luz de relleno en los exteriores aunque solo sea para compensar las diferencias de exposición entre actores y escenarios.

Por el contrario, gran parte de los interiores de la película poseen un aspecto mucho más suave y, en cierto modo, sofisticado: los aparatos de luz están filtrados o proyectados a través de bastidores y difusión e incluso varios de los sets (diseñados por Peter Murton, en sustitución del habitual Ken Adam) poseen luces integradas en los mismos que realmente realizan funciones de iluminación, algo jamás visto en cualquiera de los títulos de Moore. El aspecto de las imágenes, mucho más sedoso que el del material de los exteriores o cualquiera de los títulos previos a cargo del operador sudafricano, es también muchísimo más moderno, e incluso favorece aún más el aspecto de las dos actrices principales. No es el mejor trabajo de Morris, ni mucho menos, pero solo por modernidad y la forma en que está aplicada la técnica fotografía hace que el material se eleve notablemente y que incluso deje al título previo, “Live and Let Die”, rodado el año anterior, mucho más anticuado en términos comparativos.

Como aquél, “The Man With The Golden Gun” volvió a ser rodado renunciando al formato panorámico anamórfico (es el último Bond rodado en formato 1.85:1) y aparentemente, gran parte del material, que acredita a Panavision, fue rodado con lentes zoom, posiblemente el Cooke Varotal 20-100mm T3.1 aparecido en 1971 y que la empresa norteamericana servía adaptado para sus cámaras. La belleza de las localizaciones en Tailandia está bien captada por los cineastas, incluso con generosos planos aéreos (como el de cierre) que muestran buenos medios de producción al alcance de los cineastas. La serie Bond nunca o casi nunca se ha caracterizado por una estética moderna (e incluso lo mejor de algunas de sus mejores obras, como “Casino Royale”, son sus raíces clásicas), pero lo cierto es que gracias a la irrupción de Oswald Morris, aunque fuera de forma parcial, se marcó un punto de inflexión en la serie, bien continuada por el francés Claude Renoir en el siguiente título, el mejor de los protagonizados por Roger Moore, “The Spy Who Loved Me” (1977).

Título en España: El Hombre de la Pistola de Oro
Año de Producción: 1974
Director: Guy Hamilton
Director de Fotografía: Ted Moore, BSC & Oswald Morris, BSC
Ópticas: Panavision Normal Speed
Emulsión: Kodak 5254 (100T)
Formato y Relación de Aspecto: 35mm esférico, 1.85:1

Vista en HDTV

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