Mission: Impossible
Primera entrega de la adaptaciones cinematográficas de la famosa serie de televisión de la década de los 60, con las que el actor Tom Cruise debutó en tareas de producción y además encabezó el reparto del film. El argumento, como en muchas películas de Brian de Palma, un mero pretexto para enlazar un buen número de set-pieces muy bien coreografiadas, comienza con una misión en Praga que resulta fallida. Como consecuencia de la misma, Cruise y el único superviviente de su equipo (Emmanuelle Beart) son perseguidos por la CIA, mientras ellos intentan conseguir un listado de agentes encubiertos, que tendrán que robar de la mismísima sede del organismo gubernamental en Langley (Virginia), para tratar de averiguar el nombre de la persona infiltrada en la CIA y que se la jugó en Praga. Los resultados globales son notables, pero quizá no tan memorables como los que el propio De Palma obtuvo años atrás con su actualización cinematográfica de otra serie, “The Untouchables” (1987). Jon Voight, Vanessa Redgrave, Jean Reno y Ving Rhames completan el reparto de secundarios.
El director de fotografía fue el norteamericano Stephen H. Burum [ASC], retirado en el año 2004 al cumplir los 65 años de edad, pero que sigue siendo el operador que más veces ha trabajado con Brian de Palma, comenzando por “Body Double” (1984), “The Untouchables” (1987), “Casualties of War” (1989), “Raising Cain” (1992), “Carlito’s Way” (1993), “Snake Eyes” (1998) y “Mission to Mars” (2002), además del presente título, es decir, un total de ocho películas. Solo se le aproxima el húngaro Vilmos Zsigmond, que rodó con De Palma cuatro films, aunque nunca enlazando colaboraciones: “Obssesion” (1976), “Blow Out” (1981), “The Bonfire of the Vanities” (1990) y “The Black Dahlia” (2006). Burum, que como Zsigmond es un operador que se caracteriza por su clasicismo y por haber seguido empleando un estilo con mucha luz dura después de la irrupción y consolidación de técnicas como la luz rebotada o difusa, siempre destacó por su habilidad para iluminar los largos planos secuencia del realizador y, sobre todo, por su enorme oficio y formación técnica, que hacía que sus películas tuvieran un aspecto muy rico, con negativos siempre muy densos y colores saturados. Fuera de sus trabajos con De Palma, destacan las segundas unidades de “Apocalypse Now” (1979) y “The Black Stallion” (1979), además de “The Entity” (1982), “Rumble Fish” (1983), “The Outsiders” (1983), “War of the Roses” (1989) –nominada por la ASC- o “Hoffa” (1992) por la que obtuvo su candidatura al Oscar y el premio de sus compañeros de la American Society of Cinematographers.
Rodada en localizaciones de Praga, Londres o Escocia, “Mission Impossible” fue diseñada por Norman Reynolds (“The Empire Strikes Back”, “Raiders of the Lost Ark”), editada por Paul Hirsch y contó con efectos de Industrial Light And Magic (ILM) a cargo de John Knoll y Richard Yuricich [ASC], lo cual pone de manifiesto el lujo con el que contaron De Palma y Burum en esta producción de la Paramount. A lo largo de la misma, se aprecia muy buen el uso clásico del formato panorámico anamórfico por parte de Burum, uno de los operadores que mejor lo ha empleado, todavía en una época en que era la forma de hacer uso completo del negativo de 35mm y una pantalla ancha, en contraposición a las actuales tendencias de utilizar objetivos anamórficos muy deficientes solo para explotar características como su suavidad a máxima apertura o los destellos que se producen cuando una fuente de luz incide directamente sobre los objetivos. Brian de Palma siempre ha sido un realizador muy aficionado tanto al zoom como a las cámaras lentas, por lo que Burum siempre debía de utilizar niveles de luz muy elevados en sus películas conjuntas, en las que además, como indicábamos, exponía sus negativos a un ASA inferior al nominal (320 o 400 ASA en lugar de 500 ASA, etc) para obtener una imagen más rica.
El film comienza con una serie de exteriores en Praga que son muy típicos de Burum, por el extremo cuidado que pone en cuidar sus fondos, algo para lo cual, según sus propias palabras, tuvieron que iluminar más de dos kilómetros de calles y edificios a lo largo del río de la ciudad, además para un diafragma de T/4, exponiendo a 400 ASA, de acuerdo con su concepción clásica de un rodaje en anamórfico y hacer que las imágenes lucieran nítidas y ricas en pantalla. Estos exteriores azulados son parecidos, por ejemplo, a los que De Palma y el propio Burum ya mostrasen en “The Untouchables” o “Carlito’s Way”, incluyendo la niebla de la secuencia del barco en este film. Cuando pasa a interiores, Burum ilumina para un diafragma aún más cerrado (entre T4.5 y T5.6), suficiente para utilizar sin ningún problema el zoom cuando le es requerido por De Palma. Sus luces, por lo tanto, son muy intensas y contrastadas, aunque pone especial cuidado con la iluminación de Emmanuelle Beart, que luce muy bien en pantalla con una luz más suave y frontal, aunque Burum además adornase sus planos y los contraplanos de sus escenas (para no romper la coherencia) con una media en el objetivo para reducir la nitidez y esconder posibles defectos de la actriz francesa. El estilo, a base de luces muy intensas, e incluso mezclas de color muy interesantes (otro rasgo del trabajo de este operador, con rojos intensos y azules muy saturados) es muy vistoso, luce muy bien en todo momento y ofrece exactamente lo que cabe esperar de una producción de este tipo, una película en parte tecnológica, pero en muchos aspectos hecha a la vieja usanza.
Pero por supuesto, el punto fuerte de la película es la realización de Brian de Palma, un director que siempre, para lo bueno y para lo malo, ofrece grandes puestas en escena en sus películas, aunque desgraciadamente los resultados globales muchas veces no le acompañen. Aquí, como indicábamos, el texto no es más que un vehículo para que el realizador de “Carrie” y “Scarface” pueda orquestar un buen conjunto de secuencias en las que pone toda la carne en el asador: un notable uso del fotograma anamórfico, lentes de aproximación partida (split-diopters) para enfocar simultáneamente un sujeto en primer término y un fondo, cámaras lentas, planos torcidos (dutch-angles) en algunos momentos de tensión, elegantes movimientos de cámara, zooms para resaltar determinados instantes (la gota que chorrea por las gafas de Cruise cuando está en la sala aislada de la CIA…), todo ello, eleva notablemente el nivel de un material que, por mucho que esté escrito por guionistas de la talla de David Koepp, Robert Towne y Steven Zaillan, nunca acaba de funcionar correctamente como film de espionaje y termina confiando todo en el genio de De Palma para la acción y el espectáculo visual.
Título en España: Misión Imposible
Año de Producción: 1996
Director: Brian De Palma
Director de Fotografía: Stephen H. Burum, ASC
Ópticas: Panavision C-Series, Super Panazoom Cooke
Emulsión: Kodak 5298 (500T)
Formato y Relación de Aspecto: 35mm anamórfico (Panavision), 2.4:1
Otros: fotografía de segunda unidad de Ernest Day, BSC
Vista en 35mm & HDTV
© Harmonica Rental & Cinema/Ignacio Aguilar, 2016.