Flash Gordon

Adaptación el cómic creado por Alex Raymond con producción del italiano Dino de Laurentiis, realizada a raíz del éxito de “Star Wars” y estrenada el mismo año que “The Empire Strikes Back”. La historia tiene como protagonista a Flash, un jugador de fútbol americano (Sam J. Jones), quien junto con una periodista (Melody Anderson) y un científico (Topol), llegan al reino de Mongo, cuyo emperador Ming (Max Von Sydow) quiere destruir la Tierra como modo de entretenimiento. Con la ayuda de la peligrosa hija del emperador (Ornella Muti) y dos príncipes rivales (Timothy Dalton y Brian Blessed), los tres terráqueos intentarán vencer a Ming y así poder salvar nuestro planeta. Famosa por la icónica banda sonora a cargo del grupo británico Queen, “Flash Gordon” apuesta decididamente por un tono cómico, disparatado y paródico que, aunque no oculta sus grandes carencias, al menos hacen de él un film diferente y, sobre todo, muy entretenido.

El director de fotografía fue el británico Gilbert Taylor [BSC], una elección completamente lógica teniendo en cuenta que había sido, precisamente, el director de fotografía de “Star Wars”, en cuyo rodaje tuvo un enfrentamiento legendario con el director George Lucas. Taylor, muy veterano ya por aquél entonces, era uno de los operadores británicos más prominentes y sólo en la década anterior a “Flash Gordon” acumulaba títulos como “MacBeth” (Roman Polanski, 1971), “Frenzy” (Alfred Hitchcock, 1972), “The Omen” (Richard Donner, 1976) o “Dracula” (John Badham, 1979), además de haber sido el director de fotografía de “A Hard Day’s Night” (Richard Lester, 1964) y, sobre todo, “Dr. Strangelove” (Stanley Kubrick, 1964). De Laurentiis parece ser que quiso que Fellini dirigiera el proyecto, pero tras ser rechazado por su compatriota, no dudó en todo caso de hacerse con los servicios del habitual colaborador de éste, Danilo Donati, para que se hiciera cargo simultáneamente del diseño de producción y del vestuario, al frente de un equipo de técnicos británicos que también incluía a John Graysmark. El resultado fue un diseño de un gran colorido, muy barroco y recargado, con muchos toques exóticos, casi como si de un sueño se tratara, con un toque hortera muy en la línea de la banda sonora y el tono paródico del film.

Taylor filmó gran parte de la película a través de una media situada detrás de la óptica, para proporcionar un aspecto suave y que, además, sirviera para mejorar notablemente el aspecto de sus dos actrices principales. Es curioso este dato, puesto que gran parte de los problemas que Taylor tuvo con Lucas se debieron a la negativa del director de fotografía a utilizar la difusión, técnica que teniendo en cuenta el resto de su filmografía, desde luego no le era ajena. En los más grandes decorados de Donati, Taylor emplea niveles de iluminación altos a través de un estilo muy clásico que permite que éstos luzcan en todo su esplendor, reservando la utilización de luces integradas en los decorados para las secuencias que tienen lugar en pasillos, puestos de control, etc., aunque en todo momento se mantiene en niveles de iluminación altos. También, en una secuencia en el interior del avión en la que el cielo se vuelve de diferentes colores, Taylor emplea gelatinas de color para proyectar esos tonos sobre los intérpretes. Lo mejor de su trabajo, además de una secuencia rodada en estudio pero simulando tratarse de un pantano por la noche, es el tratamiento de Melody Anderson y Ornella Muti, siempre con luz frontal dura y dirigida, pero obtiene de ambas actrices un aspecto optimo. La puesta en escena es clásica, empleando focales angulares (sobre todo, el 55mm y el 35mm de la serie Canon K35 convertida a formato anamórfico) que permiten situar espacialmente a los personajes y mostrar los decorados en todo su esplendor.

Los mayores problemas del film, además de la inconsistencia de la difusión y de algunos halos bastante molestos que se producen por reflejos en el vestuario, vienen como consecuencia de los efectos especiales fotográficos, a cargo de Frank Van Der Veer [ASC] y su ayudante Barry Nolan. En primer lugar, porque en lugar de estar rodados en un formato de mayor tamaño de negativo (“Star Wars”, “Close Encounters of the Third Kind”, “Star Trek” o “Alien” habían demostrado la conveniencia de rodarlo en VistaVision o 65mm), utilizaron el mismo formato anamórfico de la fotografía principal, incluyendo la fotografía de maquetas, con los problemas de profundidad de campo que ello conlleva. Por ello, cuando se utiliza un efecto de positivadora óptica, se producen variaciones de color y de textura en la imagen de la primera unidad, a veces distrayendo mucho. Por otro lado, las líneas de los mattes son muy perceptibles con demasiada frecuencia, algunas pinturas mate demasiado obvias (como la fortaleza de Vultan o muchas tomas en Arboria) y la integración de los personajes o maquetas en los cielos mediante pantalla azul está muy poco perfeccionada y deja mucho que desear, colaborando a que el producto globalmente tenga un aspecto acartonado, más en la línea de “Logan’s Run” u otros proyectos anteriores a los citados. En descargo de los artistas de efectos del film, que habían demostrado su valía o la demostrarían en otros proyectos, también hay que decir que el número de planos de efectos de “Flash Gordon” es elevadísimo, muy superior a lo que era habitual en la era pre-digital.

El conjunto, por lo tanto, es muy extraño, ya que se trata de un film de aventuras sci-fi con tono paródico, pero por otro lado fue una producción de más de veinte millones de dólares de la época, que aúna buenos valores (los diseños de Donati, el oficio de Taylor) con efectos especiales que, por lo general, aunque son muy expresivos, lo cierto es que también aparecen defectuosos o fallidos en gran parte del metraje. Así pues, a día de hoy “Flash Gordon” queda como una curiosidad de su época, que también sirve para valorar más el pionero trabajo de gente como John Dykstra, Douglas Trumbull, Richard Yuricich, Richard Edlund o Dennis Muren en el campo de los efectos visuales.

Título en España: Flash Gordon
Año de Producción: 1980
Director: Mike Hodges
Director de Fotografía: Gilbert Taylor, BSC
Emulsión: Kodak 5247 (125T)
Formato y Relación de Aspecto: 35mm anamórfico (Todd-AO 35), 2.4:1
Otros: Fotografía adicional de Harry Waxman, BSC
Premios: British Society of Cinematographers (nom)

Vista en Blu-ray

© Harmonica Rental & Cinema/Ignacio Aguilar, 2013.